
El principal objetivo de la metodología de la investigación es que las personas estén capacitadas para realizar estudios e investigaciones científicas, en forma lógica y ordenada.
Algunos autores proponen como definición de la metodología de la investigación científica que es el estudio sistemático, controlado, reflexivo y crítico de proposiciones hipotéticas sobre las supuestas relaciones que existen entre fenómenos naturales, o que es el proceso sistemático, lógico y organizado para adquirir conocimientos y resolver problemas.
El principio fundamental de la metodología de la investigación científica es el método científico que se resume en la celebre frase “tanteo y error”. Esto quiere decir que el investigador se plantea una incógnita acerca de un problema, del cual no ha encontrado solución, al menos, no satisfactoria, en los documentos a su disposición, desarrolla este problema como una serie de preguntas a responder, las que presenta como las respuestas que supone o desea sean las que se encontrarán con la resolución del problema y a las que denomina hipótesis, realiza las experiencias o experimentos necesarios y luego de presentar los resultados encontrados, extrae las conclusiones a que le llevaron los resultados y publica en forma escrita (física o virtual) su experiencia.
En este sentido el investigador puede haber acertado en su intento (“tanteo”) o puede haber fracasado (“error”) y debe comenzar de nuevo por otra vía.
Mientras el investigador se mantenga en este ciclo, en busca de la verdad, se le puede considerar un “investigador científico activo”, aun cuando no existe una definición oficial ni de otra manera escrita sobre este tipo de investigador.